jueves, 1 de junio de 2017

...Un árbol para Noa...

Mi querida Noa, a la que conozco desde que no era más que un pequeño positivo en un test de embarazo, a quien he visto crecer, cumple 12 años. Y por fin va a estrenar su propia habitación, así que me pidió que le pintara un árbol en una de las paredes. Nunca me había enfrentado a un reto así, pintar algo a gran tamaño, lejos de un folio, pero por ella había que arriesgarse. Un almendro despojándose de sus últimos pétalos, llevados por el viento, como la infancia de Noa. Un árbol para colgar de sus ramas todo lo que ella quiera, sus recuerdos, sus mariposas de origami, y los primeros kirigami que haga. Un árbol para una nueva etapa de su vida. :-)


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